Se enfocará Claudia Sheinbaum en procesos de gestión y cooperación, afirman analistas

Si bien Sheinbaum Pardo busca darle continuidad a las políticas de López Obrador, cuenta con elementos para dar mejor atención a problemáticas

La nueva administración federal, que será encabezada por la primera presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, se enfocará en procesos de gestión gubernamental y cooperación, y no en decisiones de una sola persona, como ocurrió con el mandatario Andrés Manuel López Obrador, coincidieron analistas e investigadores poblanos. Asimismo, detallaron que, a pesar de darle continuidad a las políticas públicas actuales, la próxima titular del Ejecutivo colocará en ellas su sello propio.

Para Roberto Alonso Muñoz, maestro en Políticas Públicas y catedrático de la Universidad Iberoamericana Puebla, la gestión de Sheinbaum Pardo se caracterizará, entre otras cosas, por ser un gobierno de continuidad a las decisiones de López Obrador, pero con la diferencia de que habrá más coordinación con las administraciones estatales, entre ellas la de Puebla.

En tanto, Miguel Calderón Chelius, doctor en Sociología por el Colegio de México (Colmex), afirmó que la próxima mandataria tendrá varios retos que afrontar desde el primer día de su gestión, entre ellos la crisis de seguridad pública que se vive a nivel nacional, así como el rezago económico y educativo, además de las tensiones políticas que hay con Estados Unidos, en caso de que Donald Trump sea electo como mandatario de ese país una segunda ocasión.

Sello personal destacará pese a continuidad
De acuerdo con Alonso Muñoz, se espera que la próxima presidenta de México instaure una lógica de continuidad al gobierno de López Obrador, pues así lo ha reconocido Sheinbaum Pardo desde su campaña electoral a inicios de año hasta fechas recientes.

En ese sentido, el investigador apuntó que se espera que la mandataria federal base su gestión en la ejecución de políticas públicas similares a las de su predecesor, tanto en materia de asistencia social como en seguridad pública y economía, por mencionar algunas áreas.

La diferencia será que Sheinbaum Pardo tendrá mayor interés en aplicar un estilo basado en los procesos gubernamentales y no en las decisiones de una persona, como ha ocurrido hasta el momento con López Obrador, donde varias estrategias se basan en él. Dicho de otra manera, la próxima mandataria se enfocará en dar más relevancia al trabajo operativo.

Por otra parte, Alonso Muñoz destacó que la nueva mandataria nacional ha iniciado varios procesos de organización previa con los gobernadores electos de diversas entidades federativas del país, entre ellas Puebla. Esto demuestra que la próxima administración federal buscará tener mayor coordinación con los gobiernos locales, especialmente con aquellos emanados de su misma fuerza política, o bien de los partidos que componen su coalición.

En ese sentido, el investigador consideró que la sincronización entre administraciones será particularmente en la atención de problemáticas de seguridad pública.

Aunado a ello, expuso que dicha articulación permitirá a Sheinbaum Pardo trabajar conforme a una planificación de compromisos, es decir, los objetivos de la nueva presidenta irán de la mano con las promesas de la mayoría de mandatarios locales, lo que, de forma ideal, supone una oportunidad para cumplirlos sin el obstáculo de provenir de partidos políticos diferentes.

En ese contexto, Alonso Muñoz consideró que el panorama para Puebla, en términos de coordinación entre autoridades federales y estatales, será beneficioso, toda vez que el gobernador electo, Alejandro Armenta Mier, proviene de la misma corriente política que la presidenta.

Lo anterior será conveniente para el estado, pues, independientemente de sus problemáticas internas, como inseguridad, marginación social, desempleo, entre otras, la articulación entre administraciones es importante, ya que, por ejemplo, la permanente confrontación del exgobernador Miguel Barbosa Huerta con el gobierno federal ocasionó varios retos, especialmente en términos de vinculación de apoyos hacia la entidad poblana.

Pese a ello, el investigador destacó que la reciente aprobación de las reformas al Poder Judicial y la Guardia Nacional, que fueron propuestas por López Obrador, dejará varios retos a la mandataria. Señaló que la validación de dichas modificaciones legislativas se dieron en un contexto de poco consenso, lo que dejará a la próxima administración la posibilidad de encarar procesos de confrontación con la población inconforme con estas medidas.

Alonso Muñoz consideró que, pese a la continuidad prometida por la próxima mandataria federal, la nueva administración tendrá varios proyectos propios de gran impacto, como la instauración de una nueva red de transporte ferroviario de pasajeros o la implementación del proyecto del corredor interoceánico.

Atención de Sheinbaum a rezago educativo será prioridad
Según Calderón Chelius, también investigador de la Ibero Puebla, si bien es cierto que Sheinbaum Pardo busca darle continuidad a las políticas de López Obrador, la nueva administración cuenta con elementos para dar mejor atención a problemáticas particulares en el país, como el rezago educativo.

Para el sociólogo egresado del Colmex, es evidente que la experiencia académica y profesional de la nueva mandataria la hace más sensible ante los retos educativos del país. La presidenta tiene la noción de los retos en ese sentido, razón por la cual le dará más atención a la educación. Lo mismo pasará con la salud, pues tratará de mejorar la disponibilidad de los servicios médicos a la población, destacó el experto.

Aunado a ello, el especialista afirmó que la próxima titular del Ejecutivo federal tendrá la dificultad de institucionalizar varias políticas y programas sociales, es decir, debe lograr que las acciones de gobierno dependan de un engranaje sistemático, y no de las decisiones de quien encabece el país.

Por otra parte, señaló que Sheinbaum Pardo deberá afrontar múltiples retos derivados de la falta de atención en la actual administración, como el rezago financiero y la crisis de seguridad pública que se vive en el país, especialmente en estados como Sinaloa, Chiapas y Sonora, entre otros.

Finalmente, Calderón Chelius sostuvo que la nueva mandataria federal tendrá retos geopolíticos importantes, sobre todo derivados de la elección presidencial en Estados Unidos, pues en caso de que Trump gane la contienda la posibilidad de que ello afecte a México en términos económicos y sociales es alta. Asimismo, señaló que la política migratoria de nuestro país ha sido administrada de forma deficiente, lo cual deriva en varios rezagos para la presidenta.