Este viernes la Secretaría de la Defensa Nacional dará a conocer a la empresa que instalará 21 equipos no intrusivos (Rayos X) en las aduanas mexicanas con un monto de 700 mil millones de pesos.
Se trata de la compra más importante en la historia del sistema aduanero mexicano en la que se perfila una reñida competencia entre una empresa estadounidense y otra que es controlada indirectamente por el Gobierno de China.
La licitación más grande que ha realizado el Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador contempla la renovación total de los equipos de revisión de vehículos en las 21 aduanas fronterizas, 19 en el norte de México y 2 en el sur del País.
En la recta final está la compañía estadounidense “Rapsican” con amplia experiencia mundial en temas tecnológicos y de seguridad; y la empresa china Nuctech Company.
De ésta última ha trascendido que, aunque su oferta es competitiva económicamente, el Gobierno de Estados Unidos alertó que al instalar sus equipos, éstos podrían ser utilizados con fines de espionaje.
Ello ha encendido las alertas del Embajador Ken Salazar y del propio Secretario de Relaciones Exteriores Marcelo Ebrard quien transmitió la inquietud al Presidente.