Morena en el centro de los atentados armados vividos en Guadalajara

El saldo final es de tres muertos y cuatro heridos, además del pánico que causó la balacera que se registró en la zona de restaurantes de Providencia

La Fiscalía General ratificó que el homicidio de Salvador Llamas, funcionario de Puerto Vallarta y el consejero nacional morenista más votado del pasado proceso interno, se dio en una agresión directa, planificada y ejecutada por un grupo bien preparado. Llamas estaba en el Sonora Grill y habría convivido bastante tiempo con sus agresores, quienes repentinamente iniciaron el ataque y luego huyeron por una ruta cubierta por más agresores.

El saldo final es de tres muertos y cuatro heridos, además del pánico que causó la balacera que se registró en la zona de restaurantes de Providencia.

Ese día, comensales tuvieron que ocultarse bajo las mesas, se tiraron al piso o buscaron refugio en las azoteas.

“Esta tarde (de viernes) volvimos a enfrentar un acto de violencia en nuestra ciudad, una agresión directa en un restaurante en Providencia. La zona está resguardada por oficiales de los tres niveles de Gobierno, las investigaciones están en curso y no hay riesgo para circular por la zona”, aseguró en su red social ese día.

El informe de la Fiscalía

Llamas Urbina era oficialmente director general de los servicios de aguas y alcantarillado en Puerto Vallarta, pero su relevancia real estribaba en que coordinaba el gabinete de Luis Michel, el alcalde de Puerto, y de hecho era una figura central en los grupos emergentes dentro de Morena, un partido que por años vivió a la sombra de Carlos Lomelí. Llamas se convirtió en el comisionado nacional morenista más votado del pasado proceso interno y lo hizo por un margen de votos amplísimo respecto al segundo lugar. Era un probable participante (quizás sin muchas posibilidades reales) en el proceso de selección de candidato a gobernador para 2024, a la par del propio Michel que también es mencionado.

Este domingo, el fiscal General Luis Joaquín Méndez Ruiz dijo que se trató de una “agresión orquestada con un plan perfectamente estudiado y armado”, contra el jefe de gabinete del gobierno de Puerto Vallarta, en el cual participaron al menos 7 personas adentro del restaurante.

Ratificó que en los hechos murieron el jefe de escoltas del funcionario, Luis Fernando Muñoz Ortega (ex Comisario de la Policía de Puerto Vallarta), y uno de los agresores, que fue abatido en el lugar (ese es el cuerpo encontrado en el exterior del restaurante).

Méndez Ruiz subrayó que “una de las peculiaridades de estos hechos es la manera en cómo todo fue diseñado y planeado para llevar a cabo esta ejecución”. Sobre las identidades de los agresores, señaló que “los tenemos identificados en imagen. Se investigan sus identidades”.

El Fiscal dijo que quedan varios cuestionamientos, por ejemplo, qué pasó con la mochila que llevaba el funcionario asesinado.

El Fiscal fue cuidadoso cuando se le preguntó si Llamas Urbina tenía vínculos con el crimen organizado: “Si fuera un tema de crimen organizado, la investigación tendría autoridades federales”.